La marca personal es un instrumento mercantil de primer orden a la hora de comercializar productos / servicios en cualquier sector en general y, en particular, dentro del sector bodeguero.

Ante todo, se trata de una vía para ‘humanizar’ algo tan impersonal como son los productos / servicios comercializados en sentido estricto. La humanización de éstos es clave para poder acceder a la mente emocional (ie., regida por las emociones) del público destinatario de los productos / servicios comercializados a través de la marca de que se trate.

La marca personal y content marketing en el sector bodeguero

La marca personal es clave al hablar de ‘content marketing’ o ‘marketing de contenidos’ en general y, en particular, del ‘influencer marketing’. Dicho esto, ambas modalidades de marketing, son perfectamente combinables y compatibles entre sí.

La generación de contenido de valor, esto es, de interés para el público al que se dirige la comercialización de los productos / servicios a través de la marca de que se trate, es clave a la hora de captar algo tan importante como es la atención y el interés de ese grupo de personas.

A mayor abundamiento, la inclusión de la variable del ‘influencer’ en dicha ecuación, hace que el resultado final sea aún más interesante. Un ‘influencer’, básicamente, es una persona con capacidad de influir en determinadas personas, las cuales, son -cuando menos- potenciales consumidores o clientes de los productos / servicios comercializados mediante la marca de que se trate. Solamente por esto último, dicha marca, ya va a llegar seguro a dichas personas, en las cuales, el ‘influencer’ tiene capacidad para influir. Es decir, la marca, ya cuenta a priori con la atención e interés de éstas; y, sobre dicha base, es algo probable que, acto seguido, logre con relativa facilidad el ‘brand engagement’ o ‘compromiso comercial’ por parte de dichas personas. Es decir, que pasen de ser ‘consumidores potenciales’ a ‘consumidores actuales’. En otras palabras, que la acción combinada de marketing (ie., ‘branded content’ + ‘influcencer marketing’) se materialice en actos de consumo y, en suma, en rentabilidad para el origen empresarial titular de la marca, a través de la cual, se comercializan los productos / servicios portadores de la misma en el Merado.

Un claro ejemplo de la acción combinada de marketing (ie., ‘content marketing’ + ‘influcencer marketing’) lo encontramos en la serie autoproducida por la cervecera ‘AMBAR’, en la cual, no se duda a la hora de contar con una actriz como Rossy de Palma, cuya marca personal (ie., definida, entre otras cosas, por sus distintivos atributos físicos -la nariz- y/o por ser una de las denominadas ‘Chicas Almodóvar’), tiene una gran fuerza de atracción de la atención de un gran número de personas que, solamente por hecho de su mera aparición, en dicho capítulo, ello es algo noticioso para muchas personas que, sin duda, van a ver -como mínimo- el capítulo en el que ella aparece; y, con ello, también de todo el contenido comercial (ie., ‘branded content’) implícito en el guion de dicho capítulo.

Otro ejemplo significativo de esto último, lo encontramos en el anuncio de una marca de vinos de la D.O. ‘LA RIOJA’, ‘VIÑA POMAL’, que cuenta con un largo recorrido comercial en el Mercado. Es posible que, dicha marca, pueda ser percibida como ‘obsoleta’, ‘anticuada’ o ‘poco actual’ por una gran parte de personas constitutivas del público más joven de dicho vino y que, por ello, es el que mayor proyección y futuro tiene para las bodegas de ‘Viña Pomal’. Es, por ello -o no-, que no se duda en contar con algún elemento, como es la marca personal del actor Pedro Alonso (ie., que interpreta al personaje de ‘Berlín’ en la popular y afamada serie ‘La Casa de Papel’), para ‘conectar’ con ese público más joven, al cual, va dirigida la acción comercial; y, así, captar su atención para, posteriormente, intentar lograr el ‘brand engagement’ que suele traducirse en actos de venta, esto es, en rentabilidad para el origen o procedencia comercial del vino comercializado bajo la marca ‘VIÑA POMAL’.

Marca personal, ‘branded content’, ‘influcencer marketing’ y su futuro en 2.023

Todo evoluciona con el paso del tiempo y, lógicamente, el ‘influencer marketing’, no es una excepción. Con la aparición de múltiples ‘metaversos’, se prevé un crecimiento sustancial de la presencia e importancia del ‘virtual influencer marketing’, el cual, se rige por los mismos principios que el ‘influencer marketing’ tradicional -basados en el ‘content marketing’-, si bien, cuenta con el factor diferencial de que, en este caso, la persona ‘influencer’ no es humana, esto es, no es un ser humano; sino que, bien al contrario, es una creación virtual, generalmente mediante inteligencia virtual, que responde a los criterios de expertos en marketing y neuroventas para, así, generar un ‘traje a medida’ respecto de las necesidades de la mente emocional de aquellas personas destinatarias de los productos / servicios comercializados bajo la marca de que se trate. Al tratarse de un ‘producto sintético’, el margen de aportar exclusivamente aquello que es comercialmente útil es mucho mayor. Esta opción, en cambio, no se tiene al contar con ‘personas humanas, toda vez que éstas son un ‘todo’ indisociable de ‘virtudes’ y ‘defectos’; o, en otras palabras, de elementos o aspectos ‘comercialmente útiles’ y de elementos o aspectos ‘comercialmente inútiles’, los cuales, son inseparables en este último escenario.