Analizamos con el Juan Carlos Rodríguez Rojo, especialista en datos, las tendencias de tecnología que identificó el MIT para 2023

Crisis en las empresas tecnológicas… y también nuevos desarrollos

Todo indica en este comienzo del año, tras un último trimestre con muchos despidos en empresas tecnológicas, que no ha hecho sino acentuarse a lo largo de enero, que la tormenta aún puede estar empeorando.

Cierto, pero también es posible que corrientes de base estén promoviendo ya nuevas tecnologías y el impulso de nuevos negocios sobre la base de aquellas.

El MIT (MIT Technology Review), que viene pronosticando al principio de cada año qué 10 tecnologías avanzadas serán más relevantes en los siguientes doce meses. Es interesante que también alienta a votar otras tecnologías que han quedado postergadas en la escala, da la impresión a veces que por ser “demasiado” nuevas aún, pero que podrían ser tanto o más importantes.

10 tecnologías avanzadas serán más relevantes en los siguientes doce meses

10 tecnologías avanzadas serán más relevantes en los siguientes doce meses

En una presentación sumarísima, podemos ver en el mapa superior que hay tecnologías que conciernen a la salud, la mayoría (Edición del ADN -CRIPSR- y Lectura de ADN antiguo; Píldoras de nueva generación y Órganos a demanda), a los equipos (Chips open source, Vehículos eléctricos y Reciclaje de Baterías), en segundo lugar, a la imagen, aunque en campos muy diferentes (Generación de imágenes con Inteligencia Artificial y el nuevo Telescopio James Webb) y, por último, a una tecnología adaptada al uso bélico, muy de actualidad porque de hecho ya se está utilizando de manera muy significativa en la guerra de Ucrania (Drones militares en grandes masas).

Tecnologías de la salud

El ADN, su conocimiento y descifrado, es uno de los campos más llamativos y prometedores y con más progresos en los últimos años. La edición de fragmentos del genoma con la técnica conocida como CRISPR, que explota la inserción en el genoma de material genético producto de antiguas infecciones producidas por virus a organismos procariotas (bacterias y arqueas), promete grandes aplicaciones, saltos cualitativos en el tratamiento de enfermedades. Esperemos que la apuesta del MIT, que coloca este tipo de tecnología en el primer lugar del ranking, sea acertada y en 2023 se multipliquen las aplicaciones en beneficio de la salud.

El análisis del ADN antiguo ha sido hasta ahora un problema, debido a que el tiempo también deteriora las hebras muy antiguas del ADN humano. El MIT ubica esta promesa de desarrollo tecnológico en penúltimo lugar. Se trata de una tecnología muy orientada a la investigación sobre el pasado, sobre nuestros antecedentes, conocimiento que hasta ahora dependía de los restos físicos mejor conservados, con el consiguiente sesgo: hemos estado mirando solo los restos de los que se podían permitir entierros de cierto nivel.

Justo cerrando la primera mitad del ranking, en el quinto puesto, se propone la tercera tecnología relativa a la salud, unas Píldoras para el aborto vinculadas a la telemedicina. La novedad reside aquí en el término telemedicina, es decir, en un producto que, siendo considerablemente invasivo, puede prescribirse y a distancia y ser autoadministrado por los usuarios. Por tanto, de no ser por los movimientos sísmicos legislativos en Estados Unidos, con la prohibición del aborto en muchos Estados, esta tecnología debería referirse a una gama mucho más amplia de medicamentos, siempre con posibilidad de prescripción a distancia y autoadministración.

A continuación encontramos la cuarta tecnología sanitaria del grupo: la producción de Órganos a demanda. Se trata en este caso de revolucionar el transplante de órganos resolviendo la limitación de que alguien tiene que morir, tiene que haber una donación previa o posterior de sus órganos y estos tienen que ser útiles, produciendo órganos compatibles a partir de las propias células de un paciente cuando se necesite.

En el hard también hay mucha tecnología

La pieza clave del hardware probablemente es el chip. Pues bien, si hasta ahora cualquiera que quisiese fabricar un chip tenía que desarrollarlo ex novo o trabajar bajo licencia (long licensed) de una de las pocas compañías que disponen de estándares de amplia aceptación, como Intel, ahora el hardware emula al software y un nuevo estándar, llamado RISC-V, va a estar disponible para cualquiera que quiera fabricar un chip, en este caso bajo especificaciones open source. En realidad, el hard no es sino la materialización de algún tipo de soft.

Los vehículos eléctricos se están imponiendo como el nuevo modelo de cochecito individual o familiar. Hemos visto cómo iban creciendo en flotas de carsharing, en el transporte público, primero híbridos, después sólo eléctricos, y, pese a los evidentes problemas energéticos y medioambientales que comportan, tanto en su fabricación, como cualquier otro vehículo, en la producción y distribución de la energía que consumen, como en la producción de baterías y la gestión de sus residuos, la perspectiva del consumidor urbano, que espera ver desaparecer el humo que en muchas ciudades vela las miradas al cielo de los románticos y los místicos, es la que manda, porque son la mayoría. En todo caso, la tecnología debe ser desarrollada, eso pocos lo discuten, y mejorada en su eficiencia energética, económica y medioambiental, así que cuanto antes mejor.

Y ya que hemos mencionado las baterías, resulta que su reciclaje, que como casi todo lo que tiene que ver con el reciclaje y la llamada economía circular, no acaba de despegar, en parte por carencias, precisamente, tecnológicas, y en parte por la componente de fantasía sublime que lo reviste en el discurso público y activista, se espera, según el MIT, que avance un paso significativo en el año en curso.

La imagen, representación de las cosas o pura idea 

Las imágenes son el objeto, inanimado o en movimiento, que más ha crecido en la comunicación posmoderna, en una secuencia en la que tomamos como referencia cosas de la realidad, las representamos primero con datos, mediante la digitalización de ciertos elementos o medidas capaces de describirlas razonablemente bien, y con mucha frecuencia, transformamos esos datos en nuevas imágenes que representan a las cosas originales o a las relaciones entre ellas.

En las Cuevas de Altamira, remotos antecesores pintaron escenas de caza representando esos episodios vitales para su supervivencia y ahora lo llamamos arte rupestre. La representación mediante imágenes termina de un modo u otro arribando a la orilla del arte y ahora la llamada Inteligencia Artificial nos a permitir producir todo tipo de imágenes sin necesidad de que tomemos como punto de partida ningún objeto ya conocido. Es un paso que habían dado las artes plásticas hace mucho, pero ahora, por fin, todos podremos ser artistas, con lo cual, piensan muchos artistas, ya no habrá arte, pero esa es otra historia.

Entre las imágenes que vemos cada vez con más frecuencia y que solemos creer que son fotografías, están las del mundo astronómico, las de lejanos lugares del Cosmos. Pero no, en general son recreaciones construidas con datos. Y esos datos son captados por telescopios y por diversos instrumentos de medida. Ahora, el Telescopio James Webb está despertando gran expectación porque ya está proporcionando imágenes de lugares hasta la fecha inaccesibles del cosmos lejano. Obviamente, los científicos están más interesados en los datos, que les permitirán obtener un conocimiento antes imposible, que en las imágenes, pero ¿quién se sentiría tentado de estudiar Astronomía, si no tuviese en la cabeza unas buenas imágenes del cosmos?

Si vis pacem, para bellum

Desde hace casi un año estamos en guerra, incluso si la mayoría de nosotros no ha visto directamente ningún signo de la guerra real. En Ucrania hemos descubierto una novedad, el uso de drones militares en tareas bélicas, no sólo de reconocimiento o espionaje.

Un solo dron sería irrelevante en cualquier operación militar de alguna entidad cuantitativa, pero un ejército de drones constituye ya un arma táctica nada desdeñable. Y para que se generalice, es necesario abordar la producción masiva de esas mini aeronaves. Esto es lo que la tecnología podría hacer realidad este año. La mala noticia no es que haya un arma de guerra más, sino que haya guerra, pero hasta la fecha no conocemos ninguna tecnología capaz de extirpar esa manera de abordar conflictos o ambiciones de conquista y expansión del comportamiento humano. Ni tampoco sabemos, aunque haya quien crea que sí, si es mejor o peor para la especie, por malo que concretamente sea en un espacio y un tiempo dados.

CRISPR para el colesterol alto

En la última década, la herramienta de edición genética CRISPR ha evolucionado rápidamente del laboratorio a la clínica. Empezó con tratamientos experimentales para trastornos genéticos raros y recientemente se ha ampliado a ensayos clínicos para afecciones comunes, como el colesterol alto. Las nuevas formas de CRISPR podrían llevar las cosas aún más lejos.

IA que crea imágenes

Este es el año de los artistas de IA. Los modelos de software desarrollados por Google, OpenAI y otras empresas ya pueden generar obras de arte asombrosas a partir de unas pocas instrucciones de texto. Escriba una breve descripción de prácticamente cualquier cosa y obtendrá una imagen de lo que ha pedido en cuestión de segundos. Nada volverá a ser igual.

Un diseño de chip que lo cambia todo

La industria de los chips está experimentando un profundo cambio. Durante mucho tiempo, los fabricantes han concedido licencias para el diseño de chips a unas pocas grandes empresas. Ahora, un popular estándar abierto llamado RISC-V está alterando esa dinámica de poder al facilitar que cualquiera pueda crear un chip. Muchas empresas emergentes están explorando las posibilidades.

Drones militares para el mercado de masas

En el pasado, los drones militares estaban fuera del alcance de las naciones más pequeñas debido a su coste y a los estrictos controles a la exportación. Pero los avances en los componentes de consumo y la tecnología de las comunicaciones han ayudado a los fabricantes de drones a construir complejas máquinas de guerra a precios mucho más bajos. El Bayraktar TB2 turco y otros drones baratos han cambiado la naturaleza de la guerra con drones.

Píldoras abortivas por telemedicina

El aborto dejó de ser un derecho constitucional en Estados Unidos en 2022, y las prohibiciones estatales impiden ahora a muchas personas acceder a él. Así que los proveedores de atención sanitaria y las startups han recurrido a la telesalud para recetar y suministrar píldoras que permitan a las personas inducirse abortos en casa de forma segura.

Órganos a la carta

Cada día mueren en Estados Unidos una media de 17 personas en espera de un trasplante de órganos. Estas personas podrían salvarse -y ayudar a muchas otras- gracias a un suministro potencialmente ilimitado de órganos sanos. Los científicos están modificando genéticamente cerdos cuyos órganos podrían trasplantarse a seres humanos e imprimiendo pulmones en 3D a partir de células del propio paciente.

El inevitable VE

Los vehículos eléctricos se están convirtiendo por fin en una opción realista. Las baterías son cada vez más baratas y los gobiernos han aprobado normas de emisiones más estrictas o han prohibido por completo los vehículos de gasolina. Los principales fabricantes de automóviles se han comprometido a apostar por los vehículos totalmente eléctricos, y los consumidores de todo el mundo pronto descubrirán que hay más buenas razones para comprar un VE que para no hacerlo.

Telescopio espacial James Webb

Las primeras impresionantes imágenes del cosmos lejano captadas por el telescopio espacial más potente del mundo inspiraron una sensación colectiva de asombro y maravilla. Y esto no ha hecho más que empezar. Los descubrimientos llegarán casi tan rápido como los científicos puedan analizar los datos que ahora llegan a raudales. Ha comenzado una nueva era de la astronomía.

Análisis de ADN antiguo

Las herramientas de secuenciación genómica nos permiten leer cadenas muy antiguas de ADN humano. El estudio de los restos de seres humanos que vivieron hace mucho tiempo revela muchas cosas sobre quiénes somos y por qué el mundo moderno tiene el aspecto que tiene. También ayuda a los científicos a comprender la vida de la gente corriente de entonces, no sólo la de quienes podían permitirse entierros elaborados.

Reciclaje de baterías

El reciclaje es vital para evitar que las crecientes montañas de baterías desechadas acaben en los vertederos, y también podría proporcionar una fuente muy necesaria de metales para los vehículos eléctricos del futuro. Las empresas están construyendo instalaciones que recuperarán el litio, el níquel y el cobalto y devolverán estos metales a los fabricantes de baterías de iones de litio, ayudando así a reducir el coste.

Fuente:

https://www.technologyreview.com/2023/01/09/1066394/10-breakthrough-technologies-2023/